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CONSEJOS DE UN BLOGUERO, PARA FUTUROS BLOGUEROS

¡Hola, mis queridos lectores!

Al sentarme hoy a redactar este artículo, no puedo evitar pensar en que hace prácticamente nada estábamos comenzando el 2020, y ahora les escribo por primera vez en el 2021.

El año anterior fue sin duda extraño y diferente para todos, pero tuvo también varias enseñanzas positivas, como intentamos recalcar en un par de nuestras entradas. No tengo la menor duda de que este enfoque positivo se trasladará a este nuevo año, el cual nos marca un nuevo comienzo.

Me pongo a pensar también, en el por qué les escribo. Y la verdad, la respuesta es muy sencilla: para mantener contacto.

Al igual que cualquier relación interpersonal que debe trabajarse constantemente, queremos tener una relación cercana con ustedes, nuestro público. Que sepan quiénes somos y qué hacemos. Contarles acerca de temas importantes de nuestra profesión. Brindarles consejos y guías prácticas. Y lo más importante de todo, que sientan que nos conocen.

Espero que el objetivo de darles una probadita de TecniTranslations se haya cumplido y se continúe cumpliendo mes a mes conforme pasa el tiempo.

El pensar en el por qué les escribo, me lleva a pensar también en el qué les escribo y cómo lo hago.

Hoy quiero contarles precisamente acerca de eso. Del proceso que existe detrás de la redacción de los artículos para blogs.

Antes de entrar en materia, como decía mi profesor de literatura, quiero traer a la mesa un artículo que les compartí el año pasado, acerca de las “claves para redactar textos para páginas web”, el cual contiene varios consejos prácticos que aplican también para la redacción de artículos para blogs.

Si aún no lo han leído, los invito a hacerlo aquí.

Ahora, hablemos propiamente de los artículos para blogs.

Lo primero (y quizás más importante) es encontrar y definir un buen tema.

Debemos buscar temas relevantes para nuestra audiencia, que sean también afines a los objetivos que tenemos para nuestro blog. Temas “frescos”, de los cuales no existan ya infinitos artículos. Y, si nos vamos a acercar a un tema del cual ya otros han escrito, buscarle un enfoque poco trillado, que realmente logre aportar algo nuevo.

Una vez que tenemos definido el tema, y tomando en cuenta los consejos de la entrada anterior, les comparto algunos puntos a considerar cuando se redacta un artículo para blog:

  • El título: llamémoslo el “anzuelo” encargado de pescar y enganchar a nuestro público meta, despertando en ellos las ganas de seguir leyendo. Mi consejo es buscar títulos que de alguna manera introduzcan el tema, pero a la misma vez lo dejen abierto a la imaginación, sin develar toda la historia.
  • La historia: sea cual sea el tema, debemos contarlo como una historia que se le haga interesante a nuestros lectores. Contar con una buena introducción que capte la atención, un desarrollo en el que nos adentremos en el tema y brindemos información relevante, y por último, una conclusión que ojalá cierre todo lo que cubrimos en el artículo de manera creativa.
  • El autor: al escribir un blog, tenemos la gran oportunidad de escribir de manera personal, analizar los temas desde nuestro punto de vista y nuestras experiencias, y decidir cómo queremos contar cada historia (siempre y cuando el objetivo del blog lo permita). Esta es una oportunidad que no debemos desaprovechar, ya que cuando escribimos de manera personal, siempre tendremos artículos diferenciados, desde un punto de vista único y con una narrativa distinta a cualquier otro artículo.
  • Los ejemplos: les recomiendo siempre que sea posible, intentar ligar los temas del blog con historias del día a día. El utilizar ejemplos cotidianos no solo ayudamos al lector a entender y digerir más fácilmente cada tema, sino que también se genera cercanía y empatía.
  • La consistencia: recordemos que cada artículo es parte de algo más grande: el blog. Es por eso que, en la medida de lo posible, debemos intentar ser consistentes con el tono y estilo de redacción, para lograr que cada artículo construya y aporte al blog como un todo.
  • La brevedad: no escribamos por escribir. Hoy por hoy las personas están bombardeadas de información y cuentan cada vez con menos tiempo para leer. Por eso, les aconsejo buscar la forma más sencilla, corta e interesante de contar cada historia.
  • El descanso: personalmente, me gusta escribir los artículos y dejarlos un par de días guardados por ahí. Luego, con ojos frescos, los vuelvo a releer y generalmente encuentro varias correcciones o modificaciones que mejoran y aportan al artículo.

Bueno, esos son solo algunos consejos prácticos que espero les sirvan como guía a la hora de escribir un blog. Sin embargo, lo mejor que les puedo recomendar es que empiecen a escribir. Abran un documento de Word y comiencen a tipear. Lean, vuelvan a leer, borren, editen, agreguen y sigan escribiendo.

Entre más escriban, mejor lo harán. Y entre más escriban, más entretenido se volverá también el hacerlo. Así que, ¡a escribir y a disfrutar!

Me despido con un muy feliz año nuevo, y una emoción muy grande de pensar en los nuevos temas que compartiremos durante este 2021.

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